IPR Robotics, 30 años ofreciendo soluciones robóticas inteligentes
Recientemente veíamos en la televisión un robot que tenía como misión principal ayudar a los abuelos de una residencia geriátrica a realizar sus actividades diarias, tanto físicas como de memoria. Tal era la dinámica que se establecía entre los robots y esas personas mayores, que algunos residentes reconocían haberle cogido cariño. Ellos, una generación que nació sin televisión y vivió sin Internet.
La robótica no hace demasiado que ha llegado a nuestras vidas pero una cosa parece ser más que clara: los robots han llegado para quedarse y convivir con nosotros. Un claro ejemplo es la robótica colaborativa de la que nos sentimos plenamente orgullosos desde ATX Robotics. Y es que cada día ayudamos a más empresas, grandes y pequeñas, a incrementar su productividad sin dejar de lado la eficacia en los procesos.
La robótica no es algo de este milenio
Hace más de 30 años Petra Söhner-Doll fundó IPR-Intelligent, una compañía a la que más tarde se uniría su marido y juntos harían que se convirtiera en una referencia en el sector de la tecnología.
En sus inicios comenzaron diseñando, ensamblando y vendiendo todo tipo de dispositivos de alineación. Pocos años después hicieron una apuesta por los limitadores de carga. No solo se encargaron del diseño sino que también apostaron por la fabricación de las piezas.
La personalización de las soluciones
Cuando no había pasado ni una sola década desde que nació IPR, la compañía ya estaba dedicando todo su “expertise” en ofrecer a sus clientes soluciones personalizadas. El primer componente en esta línea fue una pinza para la carga y descarga de split liners en máquinas de fundición a presión.
Así fue como con la llegada del nuevo milenio IPR lanzó, por primera vez, componentes para el encerado de cavidades. Una tecnología que les llevó, solo veinte años más tarde de empezar su actividad, hacia la expansión internacional, alcanzar el liderazgo del mercado y cooperar con los principales fabricantes de automoción del mundo.
Especialistas en combinar componentes hechos a medida con bloques de construcción estandarizados, permiten al cliente reducir los tiempos de diseño y entrega, así como los costes. Una amplia gama de industrias utiliza estas soluciones, incluida la industria automotriz y sus proveedores, empresas de ingeniería de planta y de máquinas herramienta, empresas minoristas, la industria eléctrica, así como las industrias de energía renovable, tecnología médica y aeroespacial. Su know-how, sobre todo en el ámbito de las soluciones y sistemas específicos para el cliente, es el resultado de muchos años de experiencia combinados con el equipo de expertos de la empresa.
Contar con los mejores en cada materia es la filosofía de ATX Robotics. Por eso, desde el minuto uno, tuvimos claro que nuestro partner para «las manos y los pies» de los robots debía ser IPR.
ATX Robotics – Calidad e innovación ante todo
Por la calidad que ofrecen sus productos y porque queremos ofrecer lo mejor a nuestros clientes, firmamos un acuerdo de colaboración con IPR. Así, tal y como dijo Peter Jaeschke, director de ventas en Europa de IPR, «ofrecemos al mercado español los productos más innovadores para automatizar sus líneas de producción de la mano de un socio local cualificado».
Dentro de la amplia gama de sistemas y componentes innovadores para la tecnología de montaje y manipulación de IPR destacamos algunos de ellos:
Pinzas o grippers. Son uno de los “must” en las líneas de producción automatizadas. Sujetan de forma fiable las piezas, sean del tamaño que sean, ofreciendo fiabilidad y precisión en el movimiento. Cada tarea tiene una pinza adecuada a ella.
Limitadores de carga. Estos equipos son los encargados de mantener la seguridad detectando posibles colisiones. De hecho, al percibir que algo no va bien, emiten señales para que se lleve a cabo la parada automática del robot. Su reposición es sencilla y cuenta con un umbral de sobrecarga que se puede ajustar neumáticamente.
Así son los ‘Tool changers’ de IPR. Permiten el cambio rápido y seguro de herramientas tanto en robots como en sistemas pórticos. Tanto la serie TK como TK-Square ofrecen distintos tamaños dependiendo de la carga con el fin de dimensionar las diferentes aplicaciones de forma correcta.
Ejes lineales. Otra herramienta indispensable para muchos. El 7º eje de IPR cuenta con diferentes versiones, que puede ser adaptado a casi cualquier tipo de robot, ya sea un pequeño cobot o un robot industrial. Está disponible en aluminio, acero y -el primero en el mundo- hormigón compuesto, que reduce las vibraciones y el ruido al mínimo. Sus 7º ejes de movimiento lo hacen ideales para tareas que van desde el spraying a la limpieza de cavidades, fundición y muchas más.
¿Quieres saber más?
Si quieres conocer nuestra amplia gama de robots y componentes disponibles no dudes en seguir este enlace y pedir una cita para visitar nuestro showroom de la mano de un experto asesor.